Trabajadores de Arsa reclaman, ante la vulneración de derechos laborales
MEDIDA. Tras un paro total en las plantas de Arenaza, Suipacha y Córdoba, esperan una solución. Denuncian retenciones indebidas, descuentos de días de vacaciones y problemas en las prestaciones de salud.
Las y los trabajadores de la planta de Arsa en Arenaza se encuentran en estado de alerta, ante la falta de soluciones de una serie de reclamos relacionados con derechos laborales vulnerados.
En diálogo con La Posta Radio (FM 88.5), Luciano Asad, delegado de Atilra en Arenaza, destacó: “Esto es una reacción de las y los trabajadores, por ver afectados sus derechos y la salud”.
“Venimos, desde hace un tiempo, haciendo unos reclamos de una envergadura bastante considerable para lo que es el convenio colectivo de trabajo y, sobre todo, por los derechos laborales que se han conquistado a lo largo del tiempo. Hemos tratado de conseguir soluciones acá, en la planta, pero desde la dirección de la planta no las hemos encontrado”, explicó.
Respecto del proceso que se lleva adelante actualmente, detalló: “Cuando los delegados no podemos solucionar el reclamo, tenemos que elevarlo a nuestro secretario general de la seccional de Junín para que lo evalúe. Se elevó al Consejo Directivo Nacional, que analiza que la planta de Arenaza y la de Córdoba de Arsa, más la planta de lácteos ‘La Suipachense’ de Suipacha, pertenecen al mismo grupo y que en las tres había reclamos de una envergadura importante, en lo referido a restricción de derechos laborales, incumplimiento de la ley y, sobre todo, retenciones indebidas de salarios, cuando afectan directamente las prestaciones de salud”.
“Esto generó una medida de fuerza, debido a que el Consejo Directivo Nacional tampoco pudo encontrar soluciones. Fue una medida que involucraba a tres seccionales. Fueron tres días de paro con un acatamiento total y las plantas paralizadas. Hubo una conciliación obligatoria, dictada por la Nación, pero hasta hoy no hemos podido encontrar una solución. El ministerio de Trabajo, sabiendo que hay un incumplimiento de la ley y del convenio colectivo; la empresa, desconociendo su obligación de cumplir la legislación; y los trabajadores, que han padecido la pandemia en su casa, por tener factores de riesgo, llegan a la planta y les notifican que habían perdido las vacaciones. Hay una resolución de mayo, del ministerio de la Provincia, al que la empresa no acata, porque no les devolvieron las vacaciones. En la planta de Arenaza se disminuyeron los períodos de vacaciones. También hubo algunas medidas particulares con algunos trabajadores. La pandemia, en lo laboral, terminó. La gente que había ingresado en reemplazo se retiró cuando regresaron nuestros compañeros, pero quedaron dos compañeros sin funciones, supeditados a Arsa, y con esto se está haciendo un fraude a la ley”, expresó Asad.
Posteriormente resaltó: “Todo esto habla de derechos vulnerados a los trabajadores de forma cotidiana. La empresa tiene que entender que el trabajador, sin prestaciones de salud, no puede trabajar. Estamos pidiendo que no prorroguen la conciliación obligatoria, porque la empresa claramente está incumpliendo la ley; no puede conciliarse algo que está incumplido”.
“Nosotros tenemos un diálogo fluido con quienes dirigen la empresa en Arenaza. Fuimos con toda la documentación, que avala que teníamos razón en los planteos que hacíamos, para poner plazos para readecuar la situación, pero la empresa dice que todo va a quedar como se hizo y que no hay vuelta atrás”, señaló.
Por último, Asad subrayó: “La situación está planteada al límite de un nuevo conflicto. Los trabajadores y las trabajadoras nos dieron mandato de organizar lo que se diga desde las bases. Lo que más nos preocupa es la salud de las familias de los trabajadores. Y, cuando se pone en riesgo eso, ya no hay garantías de nada más. La situación es muy compleja, porque la empresa no asume su responsabilidad”.