Preocupación: otro menor, agredido en inmediaciones de la plaza Rivadavia
EN LINCOLN. La reiteración de hechos violentos en el centro tiene en alerta a las autoridades y, sobre todo, a muchos padres. Varios chicos han sido atacados por bandas de jóvenes en los últimos meses y la situación parece muy complicada.
La violencia entre jóvenes no cesa en la plaza Rivadavia de Lincoln. Parece mentira que, en pleno centro de la ciudad, ya hayan sido varios los chicos atacados por bandas de sujetos de corta edad, quienes los han agredido sin causa aparente.
La semana pasada, un chico resultó herido por otro sujeto (en este caso, mayor de edad -de 18 años-), quien le habría provocado un corte con un arma blanca. Además, otros menores han recibido golpes y han tenido que ser asistidos en el Hospital Municipal “Doctor Rubén Omar Miravalle”.
Durante este fin de semana, otro hecho violento ocurrió en la esquina de las avenidas Alem y 9 de Julio, frente a la plaza céntrica, y nuevamente tuvo como protagonistas a menores de edad.
Según datos oficiales, una mujer de 52 años denunció que, “alrededor de las 18:30 horas, estaba en la esquina de las avenidas Alem y 9 de Julio, cuando un grupo de jóvenes (se desconoce la cantidad), que serían menores de edad, incitaron a pelear a su hijo (de 13 años). Luego, uno de ellos (a quien no conoce) le propinó un golpe de puño en el rostro y le causó un hematoma en el pómulo derecho, para luego retirarse del lugar, habiéndose perdido de vista de la víctima”.
La causa se inició bajo la carátula “Lesiones leves”. Se informó a la Ayudantía Fiscal, desde la cual dispusieron las diligencias de rigor. Tomó intervención la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 12, Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, del Departamento Judicial de Junín.
PREOCUPACIÓN. Después del violento hecho, la madre del chico agredido expresó su indignación en las redes sociales. “Jamás imaginé tener que estar pasando esta situación, pero vivimos en tierra de nadie. Hoy le tocó a mi hijo”, manifestó.
Al respecto añadió: “Todos los que nos conocen saben que mi hijo jamás sale a ningún lado. Sólo los domingos va a andar a caballo dos horas y vuelve a casa, porque tiene 13 años y la calle no es un buen lugar para los chicos”.
“Hoy comenzó sus actividades de scout y, cuando terminaron, tuvo la feliz idea de ir un rato al centro con tres compañeras. Ahí empezó su pesadilla, porque un montón de hijos de putas (menores -como veinte, en total-) arremetieron contra él y lo molieron a palos. Chicos resentidos con la vida o vaya a saber qué… En patota, todos son malos”, aseguró la mujer.
También dijo estar “agradecida con una chica que se involucró y lo trajo, llorando de la impotencia, porque dijo que nadie se metía a defenderlo. Sus compañeras, horrorizadas por la situación, y mi hijo, en shock, diciendo que no va a salir a ninguna parte más”.
“Yo me pregunto: ‘¿Es justo que, por una manga de malparidos, los chicos no puedan andar solos en la calle?’. La semana pasada apuñalaron a otro chico. Hoy casi lo mataron al mío. Y mañana quizá sea otro. ¿Hasta cuándo? ¿Alguien puede hacer algo con estas escorias sociales? ¡Harta estoy!”, finalizó.