“Pampero” continuará su recuperación en el Centro de Rescate y Rehabilitación Equina
SOCIEDAD. El caballo rescatado el 31 de diciembre en condiciones extremas será trasladado este sábado al predio que la entidad posee en Magdalena. Desde Patita Pintada piden colaboración para cubrir los costos del viaje.
Después de siete intensos meses de cuidados, curaciones, voluntariado y mucho amor, Pampero, el joven caballo rescatado en condiciones extremas el pasado 31 de diciembre, será finalmente trasladado este sábado 9 de agosto al Centro de Rescate y Rehabilitación Equina (CRE), ubicado en Magdalena, provincia de Buenos Aires.
La noticia fue confirmada por Silvia Zuzek, reconocida proteccionista local y referente de la Asociación Civil Patita Pintada, en diálogo con Primero lo Primero, el programa matutino de La Posta Radio (FM 88.5). Zuzek relató cómo se logró concretar este esperado paso, que permitirá garantizarle a Pampero una vida digna y con la atención especializada que requiere su caso único.
“Cuando lo rescatamos, el 31 de diciembre, tenía una pata autoamputada, comida por gusanos, con el hueso al aire. Los veterinarios aconsejaban la eutanasia. Pero él resistió, y decidimos intentarlo”, recordó Silvia. El proceso de recuperación fue lento y complejo: en marzo se le colocó la primera prótesis, y gracias a la labor conjunta de veterinarios, voluntarios y especialistas en prótesis equinas, Pampero volvió a caminar.
El nuevo hogar de Pampero será el CRE, una institución con experiencia en rehabilitación de caballos amputados, con infraestructura adecuada, quirófano y, sobre todo, compañía de otros caballos, algo vital para su bienestar emocional. “Acá en Lincoln no podemos garantizarle la calidad de vida que necesita. Allá va a estar acompañado, bien atendido y podrá seguir creciendo con los cuidados adecuados”, explicó Zuzek.
El traslado no es sencillo: son más de 430 kilómetros y un costo estimado de 500 mil pesos. Aunque una parte ya fue recaudada, aún falta cubrir aproximadamente la mitad del monto, por lo que desde Patita Pintada lanzaron una campaña para quienes quieran colaborar.
Quienes deseen colaborar económicamente con el traslado de Pampero pueden hacerlo mediante una transferencia al alias: Patita.Pintada, una cuenta a nombre de Karen Jael Rodríguez, presidenta de la asociación. Es importante aclarar en el motivo de la transferencia que es “para Pampero”, ya que la organización también sostiene otros rescates en paralelo.
Zuzek recordó que todo el trabajo que realiza Patita Pintada es voluntario y autogestionado: “Siempre estamos poniendo de nuestro bolsillo, usando nuestros autos, nuestras herramientas. Esto es por amor a los animales”.
El sábado, un equipo de cuatro personas –dos veterinarios y dos voluntarias de Patita Pintada– acompañará a Pampero en su viaje. Además, aprovecharán el traslado para traer de regreso a Lincoln uno o dos caballos rescatados del centro Caballos de Quilmes, que se encuentran en adopción.
“Se dio esta oportunidad de sumar otro gesto solidario. Ellos están atravesando una situación crítica porque el campo que alquilan se vende, y necesitan reducir la cantidad de caballos. Hay personas de Lincoln interesadas en adoptar, así que el camión vuelve lleno, pero de esperanza”, comentó Silvia.
“Si logramos juntar más dinero del necesario, todo lo que sobre se donará al CRE, para que puedan seguir con el tratamiento y cuidado de Pampero allá. Sabemos que no es fácil, pero con un poquito de cada uno lo vamos logrando”, concluyó.
Para seguir la historia de Pampero, las redes sociales de Patita Pintada Lincoln y de Silvia Zuzek (en Facebook e Instagram) comparten actualizaciones, fotos y videos. También se puede enviar el comprobante de donación por WhatsApp al número que figura en las cuentas oficiales.
Este sábado será una jornada de emociones, lágrimas y esperanzas. Porque Pampero, el caballito que sobrevivió contra todo pronóstico, finalmente emprende el camino hacia una vida mejor. Y es posible gracias a una red de solidaridad que no se detiene.