Luciano Cabrera: “Siempre soñé con ser un buen profesional”
TURF. El jockey linqueño ganó su primera carrera en Kuwait, tras haber redondeado un estupendo año competitivo en Argentina. Al respecto dialogó con La Posta.
El jockey linqueño Luciano Cabrera ya se desempeña profesionalmente en Kuwait desde hace algunas semanas. De hecho, el deportista argentino logró su primer triunfo en el extranjero.
El corredor viene de haber redondeado un excelente año competitivo en Argentina, al haber sido el ganador del Gran Premio Jockey Club de San Isidro.
En diálogo con La Posta, Cabrera contó sus sensaciones respecto de su última victoria. “Es una alegría inmensa en esto, que parece tan fácil, pero que, sin embargo, es tan difícil”, dijo.
En la misma línea subrayó: “Se me complicó con el tema del idioma. Yo hablo muy poco inglés, y acá es difícil. Son otra cultura y otra forma de trabajar. Pero, dentro de todo, hice un esfuerzo, me adapté bastante rápido y tuve la oportunidad de cruzar pronto la meta”.
A continuación, Luciano habló sobre cómo este reciente triunfo lo ayuda en su labor diaria. “Como siempre digo, la vida del jockey es como la del goleador del equipo. Si no mete goles, ya en el siguiente partido es difícil que le tengan fe… Ganar carreras, para el jockey, es muy importante. La victoria de ayer me ayuda muchísimo en lo profesional y en este país. Desde Argentina me llegaron miles de mensajes. Les estoy agradecido a todos ellos y también a mi familia, que me apoyó en esta aventura”, enfatizó.
Después, Cabrera reveló cómo había sido su arribo a Kuwait y cómo es el trato con las personas que lo han contratado. “Los caballos son distintos y las pistas son de arena, bastante difíciles. El aire es seco. Entre comidas, me llevaban a todos lados. Cuando llegué, me costó trabajo adaptarme a esas cosas. Aprendí muchísimo inglés durante estos diez días que llevo acá. El trato es muy bueno. Sí son muy del resultado, como en todas partes del mundo, como ocurre en el turf. Tengo la posibilidad de correr para la gente que me trajo por contrato. Ellos deciden cuándo corro y cuándo no. Hay un gimnasio en la casa de ellos y me han adoptado como parte de su familia”, reveló.
También contó que su reciente victoria lo había emocionado sobremanera. “Ahora se me pasó un poco la emoción. Ayer se me cayeron varias lágrimas. Siempre me costó todo… Es doble el esfuerzo respecto de la mayoría de mis compañeros”, confesó.
Finalmente, el jockey linqueño les agradeció a quienes lo acompañan desde la distancia. “Siempre soñé con ser un buen profesional, poder triunfar como atleta y ser reconocido en mi pueblo y en mi país. Y ahora logré lo más… Están contentos conmigo. Amílcar Maldonado fue mi guía en lo físico. Gracias a Dios, a mi familia y a mi esfuerzo, llegué acá. Lo que sí puedo decir es que en la vida no hay nada fácil”, concluyó.