“Lincoln Vuela” le puso adrenalina al domingo

EVENTO. El festival, organizado por el aeroclub, contó con muchísimo público que aprovechó la jornada primaveral para disfrutar de una propuesta diferente. Acrobacias, paracaidismo, vuelos de bautismo y muchas otras variables le otorgaron un condimento único al espectáculo.

En una jornada con pleno sol y una temperatura primaveral, el Aeroclub Lincoln se vistió de fiesta para vivir “Lincoln Vuela”, uno de los últimos eventos enmarcados en el 157° aniversario del Partido.

La propuesta era por demás atractiva, y así quedó evidenciado con la enorme cantidad de gente que arribó al predio ubicado en la prolongación de la avenida Ayacucho, que prácticamente desbordó el espacio y los servicios previstos.

Desde las 10:00 de la mañana, en la ciudad ya se podían escuchar los motores de los aviones que anunciaban el inicio del festival aéreo. En el aeroclub, un notorio colorido, en las adyacencias, y una gran cantidad de aeronaves, dispuestas en el verde parque, le daban marco a una verdadera fiesta.

A lo largo de la jornada se vivieron momentos de auténtica adrenalina, con los paracaidistas y los acróbatas, quienes realizaron increíbles y arriesgadas rutinas. Tanto Jorge Malattini como “Leo” Ferraris protagonizaron destrezas espectaculares, por lo cual, tras haber aterrizado, recibieron un enorme reconocimiento del público.

También fueron emocionantes los saltos en tándem (paracaidismo de bautismo), en los que varias personas experimentaron la sensación de volar en paracaídas.

Asimismo, hubo saltos acrobáticos de excelentes exponentes, que recibieron los aplausos de las y los linqueños.

Con menos adrenalina (pero no por eso menos atractivos) estuvieron presentes los vuelos de bautismo, aeromodelismo y muestras de aeronaves de diversas procedencias.

La organización estuvo acorde. Tal vez, la cantidad de público superara la cobertura de cantina y de puestos de comida. Sin embargo, son variables a las que, seguramente, la gente del Aeroclub Lincoln se esmerará en mejorar para próximas ediciones. Por lo demás, pulgar arriba para un evento esperado, en un predio muy bien cuidado y sin detalles dejados al azar.