Columnistas

Hablemos de soberanía

Milei está llevando a cabo su proclamada “destrucción del Estado desde adentro”. Ningún país impulsa actualmente planes de congelamiento de obras de infraestructura, desguace de sus sistemas científico-tecnológicos; privatiza activos estatales, el uso de vías navegables, o el desarrollo espacial y satelital.

El Gobierno actual se encarga de despojar a la Argentina de recursos críticos y renuncia a los márgenes de acción todavía disponibles para hacer frente a esos retos.

Algunos ejemplos:

Entrega de las Malvinas

En febrero de 2024, el ministro inglés David Cameron visitó las Islas Malvinas y las consideró integrantes del Reino Unido. Después de esta visita, el Gobierno británico dispuso, sobre zona reivindicada soberana por Argentina, extender a 170.000 kilómetros cuadrados el radio de veda total para la navegación y la pesca. Además, se está construyendo un nuevo puerto británico en Malvinas. Se pretende que dicho puerto sea la puerta de entrada para la Antártida, sustituyendo a Ushuaia, nuestro puerto del sur.

La Antártida Argentina

El territorio de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur reviste particular importancia geopolítica para nuestro país y el mundo. A dicha provincia la integran las tierras y aguas reclamadas por Argentina, en las que se encuentra nuestro sector antártico.

Existe un avance en las reivindicaciones inglesas respecto de la Antártida, en el reclamo de una porción de territorio en el polo sur, que se superpone con nuestro sector antártico.

En 2024, Milei visitó la Antártida argentina, pero no declaró nada respecto de la reivindicación soberana argentina en los hielos australes, y nuestros derechos sobre Malvinas y las Islas del Atlántico Sur.

Argentina tiene presencia en la Isla de los Estados, separada de Tierra del Fuego por sólo 27 kilómetros. Por ese estrecho pasó un rompehielos militar británico. Ese lugar es mar argentino, y lo ocurrido es una provocación a nuestra soberanía.

Ley de tierras

A través de un DNU, Milei derogó la Ley de Tierras, que buscó reducir el gran peligro que representa la posibilidad de la adquisición de tierras por compradores extranjeros y/o por corporaciones de otros países. Así se brinda impunidad a las empresas megamineras, a las industrias contaminantes y al agronegocio.

De esta manera, el país termina no solo perdiendo soberanía sobre su propio territorio, sino también recursos vitales, imposibles de recuperar.

Entrega de la soberanía del río Paraná

Por la hidrovía se transportan minerales y el 80% de todas las exportaciones argentinas.

Todas nuestras exportaciones por el Paraná están obligadas a pasar por Montevideo, desactivando la realización del canal Magdalena, lo cual es inaceptable.

Existen 31 puertos manejados por grandes exportadoras, en los que se evaden, sin esfuerzo, los controles de los diversos organismos del Estado.

Sin respetar la Constitución, el Gobierno le dio, ilegalmente, al ejército norteamericano el control del tráfico del río Paraná, lo que implica una renuncia a poder asegurar el dominio soberano sobre la vía navegable.

Genocidas en la Patagonia

Cuando los soldados israelíes terminan el servicio militar obligatorio, son llevados a diferentes lugares después de cometer crímenes atroces contra civiles palestinos.

Muchos de los soldados se filmaban y fotografiaban a sí mismos disparando contra civiles o dinamitando escuelas y hospitales. Comparten estos actos en sus redes sociales, y así se puede hacer un seguimiento de estos genocidas que cometen crímenes de guerra y de lesa humanidad.

En Bélgica hay una ONG llamada “Hind Rajab”, quien fue una niña asesinada por un tanque israelita en 2024. Dicha ONG da seguimiento, a través de las redes sociales, a estos genocidas israelíes, y algunos de ellos están en la Patagonia argentina. Han pedido, a través de la Corte Penal Internacional, la detención por Interpol de estos sujetos. Pero, con un Gobierno argentino alineado al sionismo, es como si este pedido de captura no existiera. Y transitan tranquilamente vestidos de civil por el territorio e inclusive cruzan a Chile. Se sabe que son visitantes frecuentes de la estancia de John Lewis.

Estamos viviendo un momento de emergencia vinculado con lo que es nuestra propia territorialidad. Esto está pasando hoy en Argentina.

Por “Linqueños por los Derechos Humanos”