Alerta en la zona por la confirmación de un nuevo caso de dengue en Junín
PREOCUPACIÓN. Desde la Región Sanitaria III exhortan a la identificación de cuadros y a la prevención. El nuevo infectado tiene 17 años, aunque no sería un caso autóctono.
Desde la Región Sanitaria III han informado que el martes 28 de marzo se ha detectado un nuevo caso de dengue en Junín.
Desde el organismo han confirmado que el paciente es un joven de 17 años, con antecedentes de haber viajado en las últimas horas a Capital Federal, motivo que haría descartar la presencia de un caso autóctono.
Frente a este nuevo caso, desde el organismo informaron: “El equipo de epidemiología regional, dependiente del ministerio de Salud provincial, ya se encuentra realizando la vigilancia epidemiológica del caso y está alerta frente a la aparición de nuevos casos sospechosos”.
“Estamos atravesando un incremento de casos en varias regiones, tanto de la provincia de Buenos Aires como del país. Por eso es importante informar a la comunidad que, frente a la aparición de síntomas como fiebre, y dolor de cabeza y detrás de los ojos, de músculos y de articulaciones, concurra de manera inmediata a los Caps de cercanía o al hospital”, resaltaron.
En la misma línea añadieron: “El mosquito que transmite el dengue habita en las viviendas. Entonces, es fundamental revisar la casa, el patio y los jardines en busca de potenciales criaderos, y retomar la precaución de evitar picaduras”.
“En este momento es fundamental que el sistema de salud, en todos sus niveles, esté atento y alerta para poder identificar casos. La identificación es el único medio que desencadena toda una serie de acciones capaces de mitigar la propagación del virus”, finalizaron.
POSITIVOS. Desde la Región Sanitaria III informaron que en febrero había sido confirmado un caso de dengue en Morse, localidad adonde inmediatamente se había activado el correspondiente protocolo preventivo.
Casi un mes después, desde el ministerio de Salud bonaerense indicaron: “Confirmamos la aparición de un nuevo caso, aunque no autóctono, pero que puede provocar la transmisión local del virus y, por consiguiente, la posibilidad de que se produzcan brotes en la ciudad”.
“El caso fue detectado el martes 28 de marzo en el servicio del Laboratorio del Higa ‘Abraham Félix Piñeyro’. Se realizó el estudio correspondiente, ya que el paciente, de alrededor de 17 años, con antecedentes de viaje a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, presentó síntomas compatibles con dengue (principalmente, fiebre)”, detallaron.
Una vez que los resultados habían sido positivos, desde la Región Sanitaria III les comunicaron los mismos a las autoridades juninenses para que iniciaran las acciones de control de foco, realizando trabajos de descacharrización y fumigación en la vivienda y en zonas linderas al domicilio del paciente.
Por último, respecto del caso de dengue detectado en Junín, la directora ejecutiva de la Región Sanitaria III, Lucrecia López, dijo: “Por ahora no se han reportado más casos sospechosos, además del mes pasado en Morse, pero es fundamental que, principalmente desde la Municipalidad de Junín, estén alerta y refuercen las medidas de prevención”.
TRANSMISIÓN. En América, solamente ha sido demostrada la transmisión del dengue a través de mosquitos aedes aegypti. El aedes albopictus, relacionado con la transmisión de la enfermedad en otros continentes, sólo es un vector potencial en las Américas.
El aedes aegypti había sido detectado nuevamente en Argentina en 1984 y se distribuye actualmente desde el norte del país hacia las provincias de Buenos Aires, La Pampa y Mendoza.
El aedes albopictus se ha encontrado en las provincias de Misiones y Corrientes, pero no asociado a la transmisión del dengue.
Ambos mosquitos se desarrollan en envases caseros que pueden almacenar agua, como, por ejemplo, tachos, tanques, floreros, portamacetas y otros, al igual que en recipientes extradomiciliarios, como aljibes, neumáticos, piletas en desuso, residuos orgánicos, algunas plantas, botellas, latas, envases plásticos y otros. Todos ellos sirven para el desarrollo de los mosquitos. Pueden picar a cualquier hora del día, aunque generalmente lo hacen por las mañanas y las tardes.
En algunas ocasiones, el aedes aegypti se alimenta en los ambientes interiores durante las noches, si hay luces encendidas.
AUTÓCTONO. Para que ocurran casos autóctonos de dengue en una población se requiere de la presencia del virus, del mosquito y de personas susceptibles. Esto está influido por algunos factores ambientales, como la temperatura media, entre otros, los cuales modifican la capacidad del vector para el desarrollo de la infección viral y su transmisión.
SOSPECHAS. Se debe sospechar de dengue en todo caso de síndrome febril en un paciente -de cualquier edad y sexo- que resida o hubiera viajado a un área endémica o con transmisión activa del dengue que presente fiebre de menos de siete días de duración, sin afección de las vías aéreas superiores, acompañada por dos o más de los siguientes síntomas: anorexia y náuseas; erupciones cutáneas; cefalea y/o dolor retroocular; malestar general; mioartralgias; leucopenia; plaquetopenia; petequias o prueba del torniquete 2 positiva; diarrea; y vómitos.
PREVENCIÓN. Recomiendan eliminar todos los recipientes en desuso que pueden acumular agua (como latas, botellas y neumáticos); dar vuelta los objetos que se encuentran en el exterior y pueden acumular agua cuando llueve (baldes, palanganas, tambores y botellas); y cambiar el agua de bebederos de animales y de colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de las casas, cada tres días.
También instan a frotar las paredes de los recipientes con una esponja o un cepillo, a fin de desprender los huevos del mosquito que pudieran estar adheridos; rellenar los floreros y los portamacetas con arena húmeda; mantener los patios y los jardines limpios, ordenados y desmalezados; limpiar canaletas y desagües de lluvia de los techos; tapar los tanques y los recipientes que se usan para recolectar agua; y verter agua hirviendo en las rejillas y colocarles tela mosquitera.
También es importante, para prevenir las picaduras del mosquito, usar siempre repelentes, siguiendo cuidadosamente las recomendaciones del envase; utilizar ropa clara, que cubra los brazos y las piernas, especialmente durante las actividades al aire libre; colocar mosquiteros en puertas y ventanas, y, cuando sea posible, usar ventiladores o aire acondicionado en las habitaciones; proteger cunas y cochecitos de bebés con telas mosquiteras; y emplear repelentes ambientales, como tabletas y espirales.
Fuente: Región Sanitaria III.