Horror en Ameghino: “arrastró a una perrita veinte cuadras y la mató”

VIOLENCIA EXTREMA. Un sujeto, quien ya ha sido identificado, está acusado del aberrante hecho, que terminó con el animal destrozado. Lo habría atropellado y llevado de tiro por un largo trayecto y distintos puntos de la ciudad.

Una vecina ameghinense de 24 años denunció que, el martes último por la madrugada, aproximadamente a las 4:00 horas, había encontrado a una perra, de raza mestiza, tamaño mediano y colores negro y blanco, “sin vida, con signos de violencia, en la calle 12, sobre la esquina 5”.

Se estableció que se trataba de una perra, mascota de una mujer de 26 años. “A raíz de haberse cotejado el registro de diversas cámaras de seguridad de vecinos de la comunidad, se determinó la autoría del hecho en un sujeto de 22 años, quien, a bordo de un automóvil Peugeot 307 gris, había atropellado y arrastrado a la perra a lo largo de veinte cuadras”, informaron al respecto fuentes oficiales.

Una vez puesta en conocimiento del hecho la auxiliar letrada de la Ayudantía Fiscal de Florentino Ameghino, dispuso la creación de una causa, caratulada “Infracción a la Ley Nº 14.346 (Ley Sarmiento)”, y el secuestro en la urgencia del automóvil en cuestión, con fines periciales.

Desde la agrupación animalera “Patitas Ameghino” expresaron su tristeza y contaron algunos detalles acerca del hallazgo del cadáver del animal. “Anoche (por el martes), durante la madrugada, nos llegaban las primeras imágenes de una atrocidad que aún no nos entra en la cabeza. El rastro del arrastre del cuerpo cubre, más o menos, unas veinte cuadras. Lo pasearon por medio pueblo, dejando la marca de sangre por varias calles”, manifestaron.

En la misma línea agregaron: “Lo que sospechamos es que fue intencional, habiendo sido atada y arrastrada hasta su muerte. El animal fue encontrado en las calles 5 y 12 (todo su cuerpo, maltrecho por semejante acción)”.

“Esto no puede quedar así. Hay un enfermo homicida paseándose por Ameghino, como si nada hubiese pasado”, enfatizaron.

La dueña de la perrita, por su parte, realizó una publicación en Facebook en la que, además de haberles agradecido a todas las personas y los comercios que habían colaborado en el registro fílmico para dar con el autor del aberrante episodio, como así también a quienes habían auxiliado de una u otra forma, indicó: “Como es de público conocimiento, ya saben lo que pasó. Recolecté información y, con el alma destrozada, supe y fui a hablar con la persona que manejaba el auto. Estoy a la espera del perdón (mínimamente) de las mujeres, también identificadas”.

“La respuesta que encontré fue: ‘Estaba ‘mamado’, no sabía que era tu perra, no me acuerdo de nada’ (sic). Como le dije entre tantas cosas, que haya sido otro perro no cambiaba nada, sólo que acá se encontró con alguien que iba a averiguar quién había hecho semejante atrocidad, porque la perrita tenía dueña y un hogar que la esperaban”, añadió.

En la misma línea sostuvo: “Estar alcoholizado parece ser una justificación. Ver el video y la foto es inhumano. No puedo entender cómo fui respetuosa ante el dolor que tengo. Pienso: ‘¿Cómo pudo? ¿Cómo pudieron? ¡Es imposible no darse cuenta!’. Tuve que decirle. (Estuvimos) 15 minutos hablando y no le salió pedir perdón”.

“Nadie ni nada me devolverán a mi perra (para algunos, un animal, pero para mí fue una salvadora, sobreviviente que adopté en calle, porque alguien del mismo barrio que la mató la había abandonado con unos pocos meses). ‘Dakita’ me dio luz. Nos iluminó, nos sacó sonrisas, nos robó el corazón. Y también me hacía enojar, porque me hacía los pozos más grandes del mundo, pero yo la amaba como era. Mi hijo se desvivía por ella. Llegó en un momento muy duro de mi vida para enseñarme a valorar momentos simples, algo que sólo una mascota te puede dar. Ella, como los que tienen sus hijos perrunos, sabe del amor que dan. Me conocía como nadie. No puedo dejar de pedirte perdón, ‘Dakita’. No sé cómo se sigue sin vos. Todo, muy injusto. Y sólo siento dolor, impotencia y más bronca porque sé que queda en la nada”, se lamentó.

Finalmente, la dueña del animal aseguró: “En dos días le dan el auto, declara y se justifica con el alcohol. Pero, total, a mi perra nadie me la da, ni pude llevarme el cuerpo… Encima, hay que cuidarse de no dar nombre porque te hacen causa”.