Cerraron “Supermercado Damico” y la heladería “Il Dúe”, dos comercios icónicos de los años ’90

FINAL. Ambos anunciaron su cese definitivo de la actividad después de más de tres décadas. Se trata de dos firmas que han marcado una época y tenido sus años de esplendor, y hoy se han despedido de la comunidad de Lincoln.

Dos comercios tradicionales de Lincoln han cerrado sus puertas de forma definitiva este fin de semana. Se trata del “Supermercado Damico” y la heladería “Il Dúe”, dos símbolos de los años ’90 que han cesado su actividad después de más de tres décadas de notoria presencia en Lincoln.

“DAMICO”. En los últimos diez días se ha sabido que la última sucursal en pie de “Supermercado Damico” cerraría sus puertas. Por eso lanzó una gran cantidad de ofertas y promociones. Lo cierto fue que hoy se despidió con una carta emitida a través de sus redes sociales.

“Después de treinta años de historia, es con un corazón lleno de gratitud y nostalgia que anunciamos el cierre de ‘Supermercado Damico”, indicaron en el texto.

“A lo largo de estas tres décadas, hemos tenido el honor de ser parte de sus vidas y hemos compartido con ustedes no sólo productos, sino también momentos y recuerdos que atesoraremos siempre. Cada sonrisa, cada saludo y cada palabra amable nos han inspirado y motivado a ofrecer lo mejor de nosotros día tras día”, subrayaron.

A continuación, resaltaron: “Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a cada uno de ustedes por su apoyo incondicional a lo largo de todos estos años. Su confianza en nosotros fue el motor de nuestra empresa y de nuestra familia. Nos sentimos profundamente afortunados de haber sido parte de su rutina y de haber compartido este camino juntos”.

“Agradecemos a nuestros empleados, proveedores y todas las personas que han formado parte de este camino. Cada uno de ustedes ha contribuido a hacer de ‘Supermercado Damico’ lo que ha sido, un lugar lleno de comunidad”, agregaron.

“Aunque éste es un adiós, llevamos con nosotros los recuerdos y el cariño que nos han brindado. La familia Damico siempre guardará un lugar especial para cada uno de ustedes en nuestros corazones”, finalizaron.

Cabe recordar que “Supermercado Damico” había abierto sus puertas, en la que era su casa central, en la esquina de las calles Martín Irigoyen e Ituzaingó, habiendo causado una verdadera revolución en el comercio linqueño.

Con instalaciones modernas, carnicería, verdulería, panadería con elaboración propia y a la vista, bazar, paseo de compras, comida para llevar, kiosco y hasta peluquería, entre otros servicios, ir a “Damico” era como visitar un supermercado de una ciudad grande. Había llegado a tener varias sucursales. Pero, desde hacía muchos años, la sede central había cerrado (y también los demás locales), y sólo estaba funcionando el de la avenida 9 de Julio 360. Finalmente, el sábado cerró sus puertas.

“IL DÚE”. Los domingos de los primeros años de la década del ’90 tenían una cita obligada: la heladería “Il Dúe”.

Con una propuesta innovadora en diseño y sabores de helados artesanales, y enclavada en pleno centro de Lincoln, rápidamente se había convertido en uno de los comercios de referencia en la ciudad. En ese marco, se mantenía como uno de los símbolos de las heladerías linqueñas a lo largo de los años, con la particularidad de que en invierno tenía también su tradicional producción de churros.

En las últimas horas, su dueña, Silvia Graciela Guagnini de Tejero, anunció el cierre de “Il Dúe”. En una entrevista concedida al espacio “Lincoln de Antaño” contó que había abierto las puertas el 19 de septiembre de 1992 (anteriormente, había tenido otros dueños con el mismo nombre del comercio).

Graciela, como todos la conocen, contó: “Me costó tomar la decisión de cerrar. Pero acá uno no tiene sábados, domingos, cuando todos salen a pasear; nosotros estamos acá”. Además, dijo: “La gente te llena. Me llevo un puñado de conocidos y un montón de amigos”.

“Agradezco por todo el tiempo que me han acompañado. Además de clientes, ya son amigos muy valiosos. Me encuentro con gente que me dice ‘Chau, Graciela’. Yo sé que me conoce de la heladería. Es muy lindo y pienso conservarlo”, completó.