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“Samba Samba”, “Chimichurri” y Fusta le pusieron ritmo y color a un Cine Teatro “Porta Pía” colmado

EVENTO. El sábado, dos comparsas y el laboratorio experimental de percusión se unieron para brindar un espectáculo brillante. La fuerza de las baterías, la gracia de los bailarines y las bailarinas, y la alegría del público le dieron marco a un show sensacional.

La coqueta sala del Cine Teatro “Porta Pía” se vistió de fiesta este sábado para recibir el ritmo, la fuerza y el colorido de “Samba Samba”, “Chimichurri” y Fusta, en un evento cargado de emoción, colorido y pasión por el Carnaval.

Los primeros en salir a escena fueron los integrantes del Laboratorio Experimental de Percusión Fusta, bajo la dirección de Andrés De La Cruz, con una propuesta rítmica muy llamativa, en la que músicos y músicas de distintas edades ejecutaron diversos instrumentos, bajo la propuesta del director, con un lenguaje musical de señas que fue proponiendo una improvisación totalmente coordinada. Fusta se llevó un gran aplauso del público por su iniciativa, totalmente diferente de a lo que Lincoln está acostumbrado, y con un excelso nivel.

Posteriormente fue el turno de “Samba Samba”, que desplegó su clase y su distinción, en un recorrido a lo largo de la comparsa mostrando sus alas y destaques. A la gran ovación de la velada se la llevó Miguel Borghi, quien salió a escena junto a Marina Elosú, como maestro de sala y portabandera, respectivamente. Seguidamente, fue el momento de una colorida comisión de frente; más tarde, de las bahianas; y, a continuación, de las pasistas. Luego, junto al cuerpo de batería ingresó la madrina de batería, Micaela Rolaiser, para culminar el cuadro con todos los participantes de “Samba Samba” en la pasarela regalando su gracia y su movimiento.

La última parte le correspondió a “Chimichurri”, con su cuerpo de batería junto a sus instrumentos de cuerdas y cantantes, llevando adelante el show que ha marcado una diferencia en el Carnaval de Lincoln. Mientras los músicos y los percusionistas sonaban desde el escenario, el cuerpo de baile hizo lo suyo en la pasarela, con trajes de distintas ediciones de la fiesta linqueña, exhibiendo toda su gracia y su ritmo, con coreografías muy bien realizadas y el talento de bailarinas y bailarines.

El cierre de la noche fue con todos los protagonistas de “Pasarela de samba” bailando, brillando y recibiendo el cerrado aplauso de un teatro colmado.

Después de la conclusión del evento, quienes se quedaron disfrutaron de una “roda de samba”, en la que todos pudieron bailar y disfrutar de un lindo momento.