Violencia y vejez
DIFERENCIAS CONCEPTUALES ENTRE GERIATRÍA Y GERONTOLOGÍA
La geriatría es la rama de las ciencias médicas que se ocupa de los aspectos clínicos, terapéuticos y preventivos relacionados con el proceso salud-enfermedad de las personas mayores.
La gerontología es una especialidad que la conforman disciplinas de las ciencias sociales. Estudia la vejez y el proceso de envejecimiento desde el punto de vista biológico, psicológico, social y cultural.
¿QUÉ ES LA VEJEZ?
La vejez es una construcción social; es una etapa de la vida, como todas las etapas evolutivas del desarrollo humano se acumulan necesidades, limitaciones, cambios, capacidades, fortalezas y oportunidades, en síntesis aspectos positivos y negativos.
El criterio cronológico, es decir la edad de entrada a la vejez, es una convención variable según los países y la definición cronológica de la edad es un asunto sociocultural.
¿QUÉ ES EL ENVEJECIMIENTO?
El envejecimiento es un proceso dinámico, gradual, natural e inevitable. Desde que nacemos, envejecemos. Transcurre en el tiempo y está limitado por este. Es un proceso, en el que se dan cambios a nivel biológico, corporal, sexual, psicológico, social y cultural
La comprensión y el entendimiento del envejecimiento dependerá de cada persona, hay varias miradas de ver la vejez y hay varias formas de envejecer y está atravesada por la perspectiva de género, de clase, de etnia, es por ello que hablamos de “Vejeces” en plural.
No hay una sola manera de envejecer ya que todas las personas se vinculan con el envejecimiento de acuerdo a como vivieron su vida y cuál es su mirada ante la vejez.
El envejecimiento de la población es uno de los fenómenos demográficos más importantes del siglo XXI.
El creciente aumento de la esperanza de vida, el descenso de la tasa de natalidad, los cambios estructurales en la conformación de la familia, el control de enfermedades al nacer y los avances médicos tecnológicos, han posibilitado que la población mundial viva cada vez más.
FEMINIZACION DE LA VEJEZ
Nacen más varones pero llegan más mujeres a la vejez. Entre las causas, la falta de prevención de la salud, conductas riesgosas y el estrés laboral, producto de un modelo social patriarcal y machista hace que los hombres mueran antes que las mujeres; según las estadísticas, las mujeres viven siete años más que los hombres.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) indica que, en Argentina, la esperanza de vida al nacer para las mujeres ronda los 80 años; para los varones los 73 años.
La vejez es un proceso heterogéneo (cada uno envejece como ha vivido), se puede decir que existen cuestiones de género, roles, relaciones de poder y jerarquías que determinan socialmente que hacen hombres y mujeres. Estos estereotipos también marcan sus formas de vivir, de enfermar y de morir.
MAS AÑOS DE VIDA NO SIGNIFICAN MEJORES CONDICIONES PARA LAS MUJERES
Las mujeres históricamente han tenido peores trabajos, mal remunerado, fueron cuidadoras de sus maridos, parejas, padres, madres, hijxs y/o enfermos. Desarrollando una doble o triple jornada laboral, sin retribución económica, ni aportes previsionales, por estas tareas. Si bien están más habilitadas socialmente que los hombres siguen siendo “cuestionadas” por el solo hecho de ser mujer y esto se ve reflejado con mayor evidencia en la vejez.
CÓMO VISIBILIZAR Y DAR VISIBILIDAD A LA PROBLEMÁTICA DE LAS PERSONAS MAYORES
” En primer término, vincular el análisis con el marco normativo correspondiente. En el plano Nacional, contamos con la ley Nº 26.485 de “Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los Ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales” y en el internacional con la “Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores”.
Particularmente, respecto a la Convención, nos interesa resaltar que es un instrumento regional vinculante que promueve y asegura el pleno goce y el ejercicio de los derechos humanos de las personas mayores de 60 años y más. Esta declaración persigue promover, proteger y asegurar el goce pleno de todos los derechos humanos por parte de este grupo poblacional y desarrollar el respeto por su dignidad en igualdad de condiciones con las demás personas.
-Mediante la Ley Nacional N° 27360 (aprobada el 31-5-2017) Argentina ratificó la Convención Interamericana sobre Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores)
LOS MITOS, PREJUICIOS Y ESTEREOTIPOS NEGATIVOS RELACIONADOS EN ESTA ETAPA DE LA VIDA TAMBIÉN PROPICIAN SITUACIONES DE VIOLENCIA
– Evitando palabras, imágenes que estigmaticen a la vejez y a las personas mayores.
– Aportar una comunicación inclusiva evitando llamar a estas personas como abuelas, abuelos, jubilados, jubiladas (ya que este es un rol social y vincular) Preguntar cómo quieren ser llamados.
– Generar diálogos y encuentros intergeneracionales.
– Incorporar el enfoque de género y diversidad sexual.
– Propiciar y visibilizar una comunicación y vocabulario apropiado e inclusivo cuando hablamos de personas mayores y / o adultos mayores.
– Las personas mayores son sujetos de derechos y protagonistas de su propia historia.
Las Personas Mayores tiene derecho a vivir una vida libre de violencia, trabajar la perspectiva de género desde los primeros años de vida y durante todas las etapas vitales contribuirá a llegar a la vejez en mejores condiciones psicológica, física y social.
Es fundamental reconocer y promover las capacidades materiales y simbólicas de las personas mayores, incrementar sus niveles de autonomía e independencia y construir una sociedad más inclusiva y equitativa en el marco de la cultura del buen trato.
Construir diálogos intergeneracionales e integrados propicia una sociedad para todas las edades.
ROMINA RODRIGUEZ
Lic. en Servicio Social/Especialista en salud social y comunitaria.